La Sonoterapia o Terapia del Sonido es una disciplina muy antigua que utiliza la voz e instrumentos
musicales para generar determinadas vibraciones que inciden de forma beneficiosa en nuestro organismo.
Las vibraciones permiten restaurar y corregir la frecuencia de resonancia correcta devolviendo, de esta
manera, la salud a nuestras partes enfermas.
Si bien existen multitud de instrumentos que pueden usarse en el ejercicio de la Sonoterapia o Terapia del
Sonido, es la voz uno de los más poderosos y eficaces, así como también los Gongs. Pueden utilizarse
otros instrumentos como cuencos cantores, diapasones terapéuticos, así como instrumentos de percusión tales como tambores chamánicos,
tambores oceánicos, maracas, koshis, campanas, handpan,
etc.
En la Sonoterapia se trabaja la pura vibración y no solamente la música. La base científica de Sonoterapia
descansa sobre el principio de la «Resonancia Simpática», cuando un objeto vibrante provoca vibraciones
en otro objeto.
La Cimática (el estudio de las ondas) demuestra con claridad el poder del Sonido para efectuar cambios
en la materia. Un aparato de la cimática, invento del científico alemán Ernst Chladni en el siglo XVIII,
consiste en una placa metálica, sobre cuya superficie se vierte polvo o arena. Tocando el eje de la placa
con un arco de violín, la arena se mueve, levantando los granitos para formar patrones simétricos y
geométricamente armoniosos. Es decir, el sonido es capaz de efectuar cambios al nivel físico.
Tras relizar mis estudios con el gong decidí ampliar conocimientos en dicha rama de la Sonoterapia, para
estudiar técnicas de aplicación de otros instrumentos en especial los cuencos cantores terapéuticos y los
diapasones terapéuticos, utilizando estos instrumentos tanto como apoyo para baños de gong, como en
sesiones de sonido individuales.